Cada copa de vino cuenta una historia. Desde las primeras hojas que brotan en la vid hasta el momento en que descorchamos una botella, hay un proceso apasionante que define el carácter de cada etiqueta.

🌱 En el viñedo: donde todo comienza

El tipo de suelo, el clima y la variedad de uva influyen en el sabor del vino. Por ejemplo, las uvas Malbec crecen mejor en altura, lo que les da taninos más suaves y notas afrutadas.

🍇 La cosecha y vinificación

Cuando las uvas alcanzan su punto óptimo de maduración, se cosechan y se prensan para extraer el mosto. Luego, comienza la fermentación, donde la levadura convierte los azúcares en alcohol. Aquí es donde nacen los aromas y sabores que tanto disfrutamos.

🛢️ Crianza y embotellado

Algunos vinos envejecen en barricas de roble, aportando notas de vainilla y especias, mientras que otros se embotellan rápidamente para resaltar su frescura.

🍷 El momento de disfrutar

Finalmente, el vino llega a tu mesa, listo para ser descorchado y disfrutado con la mejor compañía. ¿Sabías que la temperatura a la que lo sirves puede cambiar su sabor? Un Malbec se disfruta entre 16 y 18 °C, mientras que un Sauvignon Blanc se aprecia mejor bien frío, entre 8 y 10 °C.

 

📌 Tip final: Si quieres experimentar el viaje completo, visita una bodega y vive la experiencia desde la vid hasta la copa.